Participar en un trío: ¿sí o no?

El universo de la sexualidad en los seres humanos puede ser abismal, enigmático; está dotado de misterios y secretos que se comparten en los encuentros íntimos que generalmente ocurren entre dos personas. Existen ocasiones en las que los seres humanos han optado por experimentar nuevas prácticas sexuales por diversos motivos en los cuales la curiosidad y la intriga toman posesión de los cuerpos que desean escribir en sus pieles; nuevos ritos, historias, palabras y secretos.

Muchas personas se preguntan si vale la pena tener relaciones sexuales entre tres personas, hacer o no un trío, volcándose en nuevas formas de conocimiento en los que dos harán el amor y el otro mirará la entrega silenciosa o jadeante en medio de un placer que podría ser efímero, reiterando que la necesidad de mirarse en el otro como si fuese un espejo, a veces tan solo se trata de una ilusión.

Una decisión personal e intransferible

El ser humano danza en la duplicidad que invade la red de hallazgos que consiste en mirarse en el otro y descubrir parte de sí en el encuentro, pero podría existir alguien más que ese otro ser, podría existir la posibilidad de trascender la entrega en medio del delirio e invitar nuevas bocas a las puertas del placer.

De esta forma, la idea de hacer un trío podría haber sonado en la cabeza de unos cuantos y mientras algunos optan por guardarla en las sinfonías de la fantasía como un deseo reprimido, como un juego sexual que solo podría merodear en los sueños, otros le dan la bienvenida a esta nueva forma de rito y aceptan el llamado de la imaginación para que esta se pueble de lo real, como se ve en https://www.mvideoporno.xxx/beurette-site-porno/.

¿Vale la pena hacer un trio?

Ante esta interrogante, habría que plantearse quiénes serán los protagonistas del relato inscrito en las pieles, si se trata de personas extrañas o son seres con los cuales se comparten emociones más trascendentes.

¿Una noche?, ¿un solo día que será un artilugio recóndito del olvido?, ¿será un fuego que podrá convertir la pasión en muerte si en medio del delirio jadea enmascarado un rival de los impulsos? El enemigo tácito le abrió las puertas al deseo para convertirlo en una amenaza que permanece allí, latente. Ante la pregunta, cada protagonista debe asumir que su historia consiste en un panorama sin rumbos aparentes porque el desenlace se escribirá en la medida de las reglas impuestas en el juego, donde no hay reyes ni peones, nadie trabaja para nadie, pero todos creen que los soberanos están en la cúspide.

¿Un trío es un juego peligroso?, ¿un trío es un encuentro peligroso? Siempre lo será porque la reválida se encuentra al alcance de la mano y el poder habita en los lugares menos inesperados como una cama, un cuerpo o las huellas del recuerdo.